Lo siento por los errores, el espanol no es mi idioma! Dios nos bendiga!
El movimiento estadounidense «Fight The New Drug», que se ocupa de nuevas adicciones (drogas) del mundo contemporáneo, ha publicado un estudio que arroja luz sobre lo que ahora se busca en Internet. De hecho, hay ciertas categorías de porno que se consideran atractivas y emocionantes online, pero en la vida real se consideran preocupantes y hasta ilegales. Y aunque la ciencia ha demostrado que la pornografía afecta negativamente nuestros cerebros, incluso causa la reducción de la materia gris, millones de personas siguen alimentándose de pura basura. La pornografía contamina el cerebro, las relaciones y la sociedad. La pregunta que debemos hacernos es «¿Porqué existe esta falta de conexión entre la vida real y la vida secreta online?». «¿Porque las cosas consideradas desagradables en la vida real son buscadas en Internet?».
1. Violación
Parece una locura, pero la categoría de violación es una de las más buscados por internet. “The National Survey” dice que el 50% de los consumidores de porno considera que la violencia y el dolor sean normal en la pornografía. El porno enseña a los usuarios jóvenes (y otros) que la mujer ama el dolor y el abuso. La mayoría de los programas de videos porno demuestra, como sujeto, las mujeres que inicialmente se niegan el dolor y el abuso, pero luego, poco a poco, empiezan a disfrutar de lo que van a obtener. Lo que es un engaño! ¿Alguna vez has hablado con una chica maltratada? Dirá de todo excepto que a ella le gustaba, incluso el dolor continúa hasta años después de lo sucedido. La continua visualización de material porno-violento desensibiliza nuestro cerebro. Definitivamente no es una reacción automática, y hay muchos otros factores a considerar, pero muchos usuarios de pornografía comienzan a aceptar la idea de que la violación no tiene culpa y que el sexo es placentero hasta cuando puedas hacer lo que quieras sin tener en cuenta de lo que quiere la otra persona. Si este «placer» también implica un dolor para el otro, no importa, lo que importa es que tu estés disfrutando.
2. La traición
Esposas que traicionan a sus maridos, maridos que traicionan a sus esposas, maridos que se excitan viendo a sus esposas teniendo relaciones sexuales con un desconocido, etc. La infidelidad sexual es una categoría muy popular en la pornografía moderna. La pornografía convierte la traición en placer. Un cosa que causa tanto dolor, físico y emocional, en vez, se convierte en un escenario en el cual masturbarse sin frenos. Unas investigaciones han demostrado que los consumidores de porno son cada vez menos interesados en las relaciones estables y duraderas, todos huyen de las responsabilidades de un matrimonio y una posible descendencia.
3.Incesto
En la vida real, sólo la idea del incesto causaría escalofríos, pero esta categoría está buscada por millones de usuarios de pornografía. Pornhub, uno de los mayores productores de pornografía online, en su informe anual de 2015 y 2016, informó que unas de las palabras más buscadas en el mundo fue «madrastra». ‘Hermanastra» y «madre» también estaban entre las más buscadas. Fantasías distorsionadas se convierten en normalidad. La pornografía está cultivando una generación que siente placer al pensar en tener relaciones sexuales con un pariente cercano. No son pocos los casos de niños que han echado un vistazo a su madre en momentos íntimos o en la ducha después de haber participado en un banquete de la pornografía online.
4. «Teen – Adolescente»
Esta es la parte más triste. En 2014/2015, esta categoría fue una de las más populares. Año tras año, está siempre en el «top-5». Y como son tantos los que tienen miedo de buscar abiertamente la pornografía infantil, en la categoría «adolescentes» buscan la pornografía que tiene como protagonistas, chicas o chicos, que parecen menores de edad. Comúnmente se trata de jóvenes de 18 años. Consideren por un momento la imagen de un padre o una madre que se excita viendo porno protagonizada por «adolescentes». Fantasías perversas de una joven que bien podría ser su hija o su sobrina. El porno sólo enseña a disfrutar de los cuerpos perfectos que no muestran los signos de envejecimiento. Muñecas perfectas sin defectos. Todo esto está formando una generación insensible y alejada de la realidad. La pregunta que DEBEMOS hacernos es ¿cuan fina es la línea que separa la fantasía de la realidad? ¿qué sucede cuando un niño/a, impulsado también por otros factores, transmuta sus fantasías ‘pornificadas’ en la vida real? Creo que todas las instituciones (familia, escuela, iglesia y estado) tienen que hacerse estas preguntas y no permanecer en silencio aún cuando una generación se está ‘pornificando’ hora tras hora, día tras día. El reloj está corriendo.
Para obtener más información, lee el libro «PornoToxina»
Hasta pronto
Antonio Morra